Ella mira por la ventana.Está viendo la forma de las nubes,la niebla que se cierna,los pájaros,el viento.Se está fumando un peta,y está todo tan calmado.No se oye nada más que el movimiento de los pies de ella,que se frotan entre sí para mantener el calor corporal.Ella sonríe.Sonríe,porque sabe muchas cosas.Sabe qué es lo que busca,y qué es lo que ha encontrado.Sabe que las ha pasado putas para llegar al punto en el que se encuentra ahora,pero eso no tiene importancia.No sabe exactamente la definición de amistad,ni la de amor,pero sí sabe,desde luego,lo que no es amor y lo que no es amistad.Sabe que hay cosas que olvidar,pero también que hay cosas que han merecido la pena,si es que de los errores se aprende.Da un trago más de alcohol,y sigue mirando,con los ojos entumecidos por el frío.Sabe que ella tiene miedo.Miedo del futuro.Miedo de la muerte.Y por eso intenta hacer más llevadero lo que le da miedo a golpe de teclado,intentando desdramatizar,pero en realidad lo hace para intentar quitarse el estigma del miedo.Sonríe,porque es feliz.De hecho,jamás había sido tan feliz en su vida,no recuerda otra época tan feliz en toda su vida.Y sabe a qué es debida esa felicidad.Obviamente,a él,en mayúsculas,y a las personas que la rodean.Las mejores personas que están a su lado,las mejores,y las imprescindibles.
Ella,rodeada de petas y de alcohol,ríe,aunque está sola.No es excusa,cuando uno está feliz tiene el derecho de poder reírse sola,aunque eso pueda manifestar un signo de locura.Porque, al fin y al cabo,quién no está loco.
Y ella sonríe más,porque es que resulta que jamás ha fumado un peta,y el alcohol no es su mejor compañía.Porque resulta,que su mejor compañía,es su propia sonrisa.
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