Yo ya saldé mi deuda con parte de mi piel.

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We're alright. Creen que no sabemos defendernos. Que el monopolio lo tienen ellos, que nada nos importa más. Maldita realidad que nos atormenta a cada golpe de melodía circense. Lo que mueve la pena, oigan. Cuando todo el mundo está del revés allí están los buitres leonados, los carroñeros de la melancolía, que vuelven a despedazarte a cada segundo. Yo ya estuve allí, y debería haberse acabado. Aunque todavía permanezcan semiabiertas las heridas que dejó la medicina alternativa. Pero mi número acabó hace demasiado tiempo, no tenemos por qué soportar más cargas de las que nos corresponden. Siempre igual. Siempre se me cargó en exceso. Y los órganos ya se quejan de tanto sin sentido, de tanta explotación con tala de árboles incluída. Que a mi no me dieron morfina, porque consideraron que mi cuerpo no estaba enfermo. Pero no consideraron otras maneras de estar enfermo. Enfermo es arrebatar parte de la adolescencia. Y enfermo es madurar a golpe de gotero en vena. Enfermo no solo significa "no sano", sino que también lo usan los poetas para definir a lo que es frágil, a lo que se puede matar. A lo que ayuda a sanar a otras personas armado de sonrisa efímera y dolor constante. Al veneno que uno se traga para curar al enfermo.

[Eisenheim.]